La Policía Nacional del Perú, a través del Área de Secuestros y Delitos contra la Libertad Sexual de la Depincri, detuvo a Antonio Orlando Quispe Tapia (25) y Leonardo Jesús Herrera Jaramillo (20), investigados por el presunto delito de violación sexual en agravio de una joven de 19 años. La captura se realizó en cumplimiento de una orden judicial de detención preliminar de siete días, emitida por el Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de Tacna a solicitud de la Fiscalía Provincial Penal Corporativa.
Según la denuncia presentada por la víctima, los hechos ocurrieron el 19 de octubre. La joven relató que conoció a Herrera Jaramillo a través de redes sociales y que este por WhatsApp la invitó a salir. Ambos se reunieron en el Paseo de las Aguas, en la avenida Leguía, donde también se presentó Quispe Tapia. Los tres bebieron licor —primero un macerado y luego cerveza— y posteriormente acudieron a la vivienda de Quispe, ubicada en la calle Manco Cápac, en la Junta Vecinal Miguel Grau.
De acuerdo con el testimonio de la agraviada, tras ingerir las bebidas perdió el conocimiento y, al despertar de madrugada, se dio cuenta de que había sido abusada sexualmente. Dijo haber despertado desnuda y, al no encontrar su ropa, se vistió con prendas del presunto agresor para poder regresar a su casa.
La víctima presentó la denuncia el mismo día de los hechos. Agentes de la Depincri y el fiscal Abraham Apaza Coronel iniciaron las diligencias y, al no hallar a los implicados en flagrancia, solicitaron a la Corte Superior de Justicia de Tacna la detención preliminar y el allanamiento de sus viviendas. La jueza Gina Tapia autorizó ambas medidas, considerando los indicios recabados, y es que el examen médico legal practicado a la joven confirmó lesiones traumáticas recientes en partes íntimas, lo que reforzó la hipótesis fiscal.
Las capturas se efectuaron la noche del domingo 2 de noviembre. Leonardo Herrera Jaramillo fue detenido cuando salía de su vivienda en el conjunto habitacional Alfonso Ugarte, en el distrito Gregorio Albarracín. Horas después, la Policía ingresó a la vivienda de Antonio Quispe Tapia, en la calle Manco Cápac, luego de forzar la puerta para cumplir la orden de descerraje.
Ambos permanecen recluidos en el puesto de auxilio rápido Mario Santos Mateo, mientras la Fiscalía continúa las investigaciones para determinar su grado de participación en los hechos.

