El expresidente Alejandro Toledo no pudo presentar sus alegatos finales en el juicio oral por el caso Ecoteva debido a un cuadro de descompensación física ocurrido en el penal de Barbadillo. Su abogado, Roberto Su, informó que Toledo padecía escalofríos, temblores y dificultades para hablar con firmeza, lo que imposibilitó su intervención en audiencia.
Durante la sesión, el abogado comentó lo siguiente ante la jueza Josefa Izaga: “Lo he encontrado con ligero temblor… le han tomado la presión arterial y estaba descompensado con 100 sobre 60, con escalofríos y temblores. Tiene dificultades para sostener la voz”. Ante esta situación, solicitó que Toledo fuese trasladado nuevamente a su celda mientras él permanecía en la audiencia. La magistrada aceptó la petición y otorgó a Toledo un receso para estabilizarse.
“Solicito que se le pudiera permitir que en la siguiente sesión, para lo cual voy a tener que coordinar. Debió recibir su medicación temprano, no se ha podido estabilizar para estar bien. (…) Solicito (también) que mi patrocinado vaya a su celda y yo me quedo en la audiencia”, agregó.
Al intentar intervenir brevemente antes de retirarse, Toledo expresó: “Permítame, señora magistrada, no me siento bien”. Sin embargo, la jueza le respondió que, de poder hablar, debía presentar su defensa; de lo contrario, debería retirarse.
Casos anteriores
En julio del 2024, el expresidente Alejandro Toledo presentó malestar en plena audiencia pública por el caso Interoceánica Sur y solicitó ser atendido en un hospital porque se sentía “absolutamente mal”. En respuesta, los magistrados del Segundo Juzgado Penal Colegiado solicitaron al abogado del exmandatario coordinar con su familia para las acciones pertinentes.
“Me siento absolutamente mal. No hay un médico. Voy a (inteligible). Me estoy ahogando. Por favor, hable con Roberto, por favor. Siquiera a un hospital de aquí o a la clínica”, exclamó con la voz entrecortada.
El abogado del expresidente, José Roberto Su Rivadeneyra, explicó el estado de salud de su defendido. “Yo me he acercado al penal. He ingresado y lo he encontrado al presidente, temblando, con un fuerte en el pecho. Llamé a una enfermera y tenía la presión de 100 sobre 70. Muy baja porque él es hipertenso. Suele tener 140 a 150. También, me dijo que sentía un hormigueo en las manos”, dijo a Canal N.