‘El Monstruo’ es protegido por el temible

'El Monstruo' estaría siendo protegido
‘El Monstruo’ estaría siendo protegido en Sao Paulo: ¿qué es el Primeiro Comando, la organización que lo escondería? Foto: Composición Infobae Perú

El Monstruo’, nombre que esconde la verdadera identidad de Erick Moreno Hernández, líder de la organización criminal peruana ‘Los Injertos del Cono Norte’, permanece prófugo en São Paulo, Brasil. Llegó allí tras huir de las autoridades peruanas, cruzar Bolivia y establecerse en la capital paulista, donde su presencia no pasó desapercibida.

Las autoridades locales sospechan que el peruano estaría siendo protegido por el Primeiro Comando da Capital (PCC), la organización criminal más temida y poderosa de Brasil.

La posible conexión entre Moreno y el PCC cobró fuerza tras un operativo de gran escala realizado en São Paulo, que movilizó a 160 agentes del Batallón de Choque. Según el medio brasileño Metrópoles, la operación se activó tras detectar indicios de presencia de mafias peruanas, que se habrían intensificado con la llegada de ‘El Monstruo’ al país.

Policía de Brasil sigue la
Policía de Brasil sigue la pista de ‘El Monstruo’. (Foto: Infobae Perú/Ministerio Público de Brasil)

El Primeiro Comando da Capital surgió desde el corazón del sistema penitenciario brasileño. Nació en 1993, en la cárcel de Taubaté, cuando ocho reclusos decidieron formar una organización tras la masacre de Carandiru de 1992, en la que murieron más de 100 internos durante una intervención policial.

Al menos 8 sujetos identificados
Al menos 8 sujetos identificados serían la conexión chilena.

Inspirados en el Comando Vermelho, otro grupo criminal brasileño, adoptaron lemas de justicia y revolución, con el discurso de resistir al sistema que los había condenado. Con el tiempo, esa retórica dio paso a una maquinaria delictiva compleja, bien organizada, capaz de mover droga, dinero y armas con precisión militar.

El PCC creció sin pausa. De São Paulo se extendió a cada rincón de Brasil. Hoy tiene presencia en todas las unidades federativas del país y mantiene operaciones más allá de sus fronteras. Ha extendido sus tentáculos a Europa, Asia y buena parte de América del Sur, consolidando su influencia con violencia, sobornos y alianzas estratégicas.

El poder del PCC se sostiene sobre una amplia red de actividades ilegales. Domina el tráfico de cocaína en Brasil, donde opera como el principal proveedor de droga hacia Europa, gracias a alianzas con organizaciones como la mafia italiana ‘Ndrangheta’ y el Cártel de Jalisco Nueva Generación, en México.

Según el medio Insight Crime, a través de estas alianzas, PCC gestiona más del 50 % de las exportaciones brasileñas de cocaína hacia el continente europeo.

(AFP)
(AFP)

Su influencia no se limita al narcotráfico. También controla rutas de minería ilegal en la Amazonía, impone “cupos” en zonas rurales, participa en secuestros, extorsión, lavado de activos y ha logrado infiltrar a funcionarios de la policía. En la selva brasileña, incluso actúa como garante armado de operaciones mineras ilegales, movilizando maquinaria y resguardando la extracción de oro.

A inicios de este año, el asesinato del empresario Antonio Vinicius Gritzbach en el aeropuerto de Guarulhos evidenció la profunda infiltración del PCC en las fuerzas policiales brasileñas.

El PCC se ha convertido en una red continental cuya influencia se extiende por América Latina, particularmente en zonas clave para el tráfico de drogas. En la triple frontera entre Brasil, Paraguay y Argentina ha establecido bases sólidas, aliándose con grupos locales como el Clan Rotela y usando la hidrovía Paraná-Paraguay para el contrabando.

Fotografía de una pared con
Fotografía de una pared con pintadas alusivas a la banda criminal Primer Comando de la Capital, en Sao Paulo (Brasil). EFE/ Isaac Fontana

En Bolivia, su presencia es fuerte. En mayo de 2025, las autoridades detuvieron a Marcos Roberto de Almeida, alias “Tuta”, uno de sus líderes, en Santa Cruz de la Sierra. En Chile, su actividad va en aumento. Y en Perú, aunque no tiene una estructura dominante, ha logrado presencia en regiones fronterizas, donde colabora con bandas locales.

En la selva peruana, su interés es claro: rutas de cocaína, control de comunidades y acceso a los afluentes del Amazonas. El caso de Erick Moreno sugiere que estas relaciones podrían estar evolucionando. La posible protección ofrecida por el PCC a ‘El Monstruo’ no solo refuerza su presencia en la región, sino que podría marcar el inicio de una colaboración más directa entre mafias peruanas y la red criminal más poderosa de América Latina.

By admin

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *