Desde CADE Ejecutivos 2025, Aldo Ferrini, CEO de AFP Integra, comparte con El Comercio su perspectiva sobre el sistema previsional peruano, tras las recientes modificaciones que realizó el Congreso que incluyó la aprobación del octavo retiro de fondos por hasta 4 UIT. Además, el ejecutivo brinda detalles sobre el impacto que ya ha tenido el deterioro de los bonos de Rutas de Lima con vencimiento en 2036 y 2039, adquiridos años atrás por parte de diversas administradoras privadas, sobre los fondos de pensiones locales, tras las alertas que ha generado la disolución de la filial de Brookfield Asset Management.
- El octavo retiro de fondos de pensiones ya está en proceso y se están realizando las solicitudes. ¿A cuánto asciende el impacto revisto para AFP Integra? Entiendo que hay menos personas dispuestas a retirar frente a otras oportunidades.
Estamos viendo un poco menos de solicitudes. De todas maneras, los números son altos. En esta primera vuelta estábamos esperando que soliciten [el retiro de fondos] más o menos el 60% de los afiliados que tenemos. Estamos en 56% [del total de afiliados de AFP Integra]. Es una buena noticia, pero no es que sea significativamente menos. Por lo tanto, el impacto igual será relevante. Esperamos que al final del proceso de retiro sean entre S/10.000 millones y S/12.000 millones los que salgan del fondo de AFP Integra, que es alrededor de 25% [de fondos administrados].
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- ¿Algo de eso puede recircular en otros productos que tienen, como el aporte voluntario?
La evidencia de retiros pasados no es positiva. No hay mucho que se quede en ahorro voluntario, incluso no hay mucho que se quede en ahorro en general. Eventualmente mucho de este dinero va a los bancos, que tendrán un aumento en sus depósitos, pero creo que gradualmente va [a ir] cayendo. […] Lo que se ve es un dinamismo de consumo.
- Con los cambios hechos en el Congreso, queda la sensación de que la reforma previsional quedó coja. ¿Cómo lo ven ustedes?
El gran cambio que hace el Congreso y que afecta a la reforma es el octavo retiro, porque tiene un impacto en la pensión mínima y en la reconstrucción de los ahorros de las personas, que se buscaba de alguna manera con la reforma.
Los otros dos cambios responden a un reclamo de la población que estaba siendo afectada: el [aporte] independiente y el 95,5% para afiliados menores de 40 años. Sí tiene un impacto en la reforma, pero es algo que todavía se puede recuperar en el futuro. Es decir, tenemos que evaluar de qué manera hacemos que los independientes se vean motivados a aportar y que no sea obligatorio. Hay mecanismos que se pueden trabajar.
“Esperamos que al final del proceso de retiro sean entre S/10.000 millones y S/12.000 millones los que salgan del fondo de AFP Integra, que es alrededor de 25% [de fondos administrados]”.
Por ejemplo, una contribución equiparada. Que el Estado le diga al independiente “si tú aportas, te pongo un poco más para tu pensión”. [Ahí] hay que hablar del costo fiscal como el incentivo del ahorro, algún tipo de beneficio tributario para el independiente. Hay mecanismos por explorar, porque al final de cuentas, lo importante, seas o no independiente, es que igual te vas a pensionar, igual necesitas ahorrar.
El rol que tiene el Estado y nosotros como partícipes de un sistema previsional es introducir mecanismos que ojalá funcionen. Probablemente no todos funcionarán, pero si encontramos algún ángulo que genere un incentivo para el [aporte del] independiente, creo que es positivo.

Foto: Joel Alonzo / El Comercio
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- ¿Lo del 95,5% no es el retroceso principal que encuentran en los cambios del Congreso?
También es un retroceso, pero, otra vez, tenemos que ver de qué manera fomentamos que la persona al momento de jubilarse no retire todo. De repente un beneficio tributario al retiro, ver más innovación en productos. Entonces, hay que mirarlo desde otra perspectiva para que el sistema en su conjunto cumpla con el objetivo final que es otorgar una pensión.
- La SBS está estudiando realizar nuevas propuestas para reformar el sistema de pensiones, abordando incluso las militares y policiales. ¿Cómo ven esta opción?
Es importante que se entienda que el responsable del ecosistema de pensiones es el Estado, es el que define las reglas; lo vemos como el que define el monto del aporte, si se retira o no [dinero de los fondos]. Dentro de ese ecosistema, tenemos que ver cómo hacemos que el sistema [de pensiones] se complemente entre los distintos públicos: independientes, dependientes, policiales, militares… hay que ver si se puede hacer eso.
Lo que busca la SBS es tener un equipo que permanentemente vaya implementando mejoras al sistema. El sistema de pensiones en cualquier país tiene que ser un reflejo y estar alineado al mercado laboral, que en el Perú es informal. En el mundo, el mercado laboral ha cambiado mucho con trabajos tipo Rappi, entonces, hay que adaptar los sistemas para que puedan darle una solución a todos los tipos de trabajadores. Por lo tanto, me parece sano que la SBS entienda y haga ese esfuerzo de estar permanentemente revisando y hablando de propuestas que fortalezcan al sistema.
- Hay mucho que se puede hacer y que quedó en el tintero.
Lo vimos en una presentación en CADE Ejecutivos, el 30% es formal. El sistema de pensiones de cuentas individuales funciona para el trabajador formal dependiente. Nos falta un 70%. Hay que ver qué oportunidades podemos crear o qué reglas podemos implementar para que todos los peruanos tengamos una mejor pensión.
- Considerando que se vienen las elecciones, ¿todavía observan como un riesgo potencial la posibilidad de que se continúen dando retiros de fondos?
Lo he dicho varias veces: cualquier retiro va en contravía del objetivo de un sistema previsional, que es generar una pensión. Lo que el Congreso hizo con el octavo retiro es una irresponsabilidad que la vamos a sufrir los peruanos y no los congresistas. Muchos de ellos probablemente no serán reelegidos. Lo que nos toca es seguir alertando la importancia de tener un sistema previsional, porque el Perú va a tener un sistema previsional. Hoy día tenemos dos sistemas: el de reparto, que es la ONP, y el de cuentas individuales. Como peruanos tenemos que ver qué sistema queremos y qué funciona hacia adelante. Soy optimista en que no habrá un nuevo retiro.
“Si ese arbitraje se gana, los bonos se pagarán. Por lo tanto, el efecto es temporal”, comenta sobre el impacto de los bonos de Rutas de Lima.
- Por otro lado, Bloomberg alertó respecto a la disolución de Rutas de Lima y cómo esto puede poner en riesgo los fondos de los afiliados a las AFP, por la compra de bonos de la filial de Brookfield que se concretaron por parte de las administradoras (entre ellas, AFP Integra). ¿Cuál es el nivel de exposición que tienen? ¿Es un riesgo considerable para la cartera?
Efectivamente se ha alertado sobre ese tema que nosotros conocemos hace años, desde que se inició el problema con los peajes. Más allá de la carga política que tiene el bono de Rutas de Lima, es un activo más de un portafolio diversificado. No es el primer activo que tiene problemas en la historia de los fondos de pensiones ni será el último, porque para eso diversificamos.
La posición que tenemos en AFP Integra, en el Fondo 1 y el Fondo 2, en los bonos de Rutas de Lima, es alrededor de 25 puntos básicos, es decir, 0,25%. Si lo traducimos al impacto del fondo este año, el Fondo 1 está rindiendo, por ejemplo, alrededor de 8%. Si este 0,25% cae más, lo máximo que te afecta es que la rentabilidad disminuye de 8% a 7,75%. Eso desde el punto de vista de la diversificación.
Lo otro que es relevante es que es un bono que tenía muchas coberturas. Por lo tanto, si bien sufre porque los flujos de caja están siendo afectados, sí soy optimista, sea porque los peajes eventualmente se van a restituir cuando se solucionen los problemas o porque hay una ruta de arbitraje que inició la compañía. Si ese arbitraje se gana, los bonos se pagarán. Por lo tanto, el efecto es temporal.
- ¿Hay cobertura suficiente? ¿No debería de haber temor, desde su punto de vista?
Siempre hay riesgo, por eso te pagan un retorno, pero creo que en la coyuntura, soy optimista que se va a recuperar parte importante del bono.
En general el sistema, la exposición que tienen [también otras administradoras de fondos de pensiones] no es significativa. Si lo pones en millones de soles, es un montón de plata, lo que informó Bloomberg y es la verdad [S/1.500 millones en bonos locales que corren el riesgo de caer en default]. Cuando lo pones en relación al fondo, lo que hay hoy en día son 25 puntos básicos. Y hay una parte que se desvalorizó y que ya afectó al fondo, pero si miramos el portafolio, no son más de 25 puntos básicos en el Fondo 1 ni en el Fondo 2.
El bono, desde el 2014 hasta la fecha, ha pagado casi 90% del valor de la inversión en intereses . Falta pagar todo el capital y eso hoy día, por el riesgo que tiene, está castigado a un 30%. Entonces, de cada S/100 que me tiene que repagar el mercado, me paga S/30. Lo que creemos es que en el momento del arbitraje o en caso los peajes se restituyan, ese 30% va a subir. No va a ser la inversión como la pensamos inicialmente, pero tampoco creo que sea una inversión que genere pérdidas en el fondo.
